Simplemente, te quiero compañera

Te quiero con voluntad de noche

Te admiro con calor de sol

Te destino con esperanzas de tardecita

Solo  pido que aparezcas en tu hora

Yo te siento cada instante, compañera

Caminando por Palermo en la mañana

En la esquina de Ayacucho y Las Heras

En los bancos de tu Recoleta centenaria

Te imagino yendo por Leandro Alem

En las veredas de tu apurada madurez

Quedo resignado a ser tu sombra

Colección interminable de miradas tuyas

Distancias de nada en nuestras bocas

Protocolos de otras vidas que aun transitas

Me asomo en tu hora rara, te pregunto

Hago esfuerzos por saberte esta mañana

Te espero de todas formas compañera

Levanto las banderas de mi mundo

Recojo cada escena de tu lado

Llamo a las voluntades de la mesa

Las anudo en el mantel y les pregunto

Nadie contesta, no saben de tu vida

Importa poco, te vas esta madrugada

Me repongo al dolor y miro tu regreso

Llamo a cada sentimiento con tus palabras

Los unes en la respuesta de tus lágrimas

Y partes con mi ilusión hacia tus dudas