Mañana no importara la mala suerte,
al despertar se disipara el triste dolor.
Con los primeros rayos del sol olvidare
el recuerdo y todo triste adiós.
Mañana cuando mi cabeza no gire,
olvidare todo rastro de rencor.
No recordare la euforia de la guitarra,
ni la cerveza, ni quien no la pago.
Mañana vomitare el caldo negro,
escupiré a la cara de la mala suerte.
Mañana, quizás en la estúpida mañana,
dejara de girar tan rápido mi cabeza.
Quizás mañana olvide todo aquello,
pero no olvidare que estuve ebrio.
No olvidare que cante con amigos,
quizás olvide mujer tu triste adiós.
- Autor: Cronista Ebrio (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 25 de agosto de 2013 a las 04:47
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 67
- Usuarios favoritos de este poema: El Hombre de la Rosa
Comentarios1
Se palpa la prestancia genialidad y hermosura en tu bello poema... estimado poeta y amigo Cronista Ebrio
Saludos y amistad
Críspulo
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