Elegía...

El calendario marca otra vez lunes, uno mas es uno menos dice la costumbre...

Esto de escribirte y que no lo sepas me da cierta libertad, algo de confort,

no me ata a la métrica y poco uso la retorica,

pero es justo también admitir que esto no es licencia pa’ olvidarte. 

Son las 5 am y el desayuno me alimenta mas las ganas de largarme que a mi cuerpo,

y en medio de un sorbo de café me encontré unos huevos con pan integral que tanto te gustaban,

en una casa que no era la nuestra y tu sonrisa endulzándome el día. 

Poco hace falta para empezar con la rutina y aún menos para volverme loco,

por que me haces falta, por que no te olvido..,

pero no importa , ni a ti, ni a nadie y trato de que a mi tampoco. 

Hace frio y ya no tengo tu “te amo” para darme calor,

son las 2 pm y entre los ensayos, la siesta y el almuerzo descanse por un momento de mi mente,

de mi ausencia, de mi dolor.., de tu partida. 

Ya no me duele, no me importa y ni me acuerdo; que decías que me amabas,

que no existiría nadie como yo, que nunca me dejarías, que estarías conmigo siempre,

no, no me acuerdo, y no estoy amnésico ni loco.., estoy muerto!