MIS FANTASMAS

Solamente por querer vivir un poco mi  propia vida, sin molestar a nadie ni forzar el destino oh cambiarlo, el batallón de amigos se ha evaporado.

Como puede ser tan incierta la amistad. No he dejado de ser lo que he sido siempre, igual en todo, lo único que ha cambiado fue coger en mis manos lo que Dios me regalo. Compañía y atención por parte de alguien. Nunca me había pasado por la cabeza que  sin entender el porqué,  todos me han puesto de lado.

.Días y días sin una llamada, como pájaros se fueran a otras parajes, he quedado con sus nidos vacíos, en

Solamente por querer vivir un poco mi  propia vida, sin molestar a nadie ni forzar el destino oh cambiarlo, el batallón de amigos se ha evaporado.

Como puede ser tan soluble la amistad. No he dejado de ser lo que he sido siempre, igual en todo, lo unico que ha cambiado fue coger en mis manos lo que Dios me regalo. Compañía y atención por parte de alguien. Nunca me había pasado por la cabeza que  sin entender el porqué,  todos me han puesto de lado.

Por veces, tengo ganas de llamar por teléfono a preguntar como están. No lo hago. No debo.

Por mí acepto, pero por el no. Nada hizo de mal a nadie, es humilde, educado, es verdadero, no finge, por veces pienso que tienen celos y que querrían tener un igual.

Ando pensativa, ¿que tengo yo de anormal para que no pueda  vivir sin hacer celos a todos? ¿Por qué piensan que ya no soy la misma?  ¿Será que les hace daño mi bien estar y felicidad?

El silencio, es un principio de algo, que viene sin ruido pero llega. Un pedido me harán de ayuda, para algo, lo tengo como definitivo.

Las personas solo viven bien cuando otros están mal. La felicidad, la manera de ser, el aspecto, todo influye, pensado en mi tiempo ya vivido, reconozco que ha sido siempre así. Desde mis tiempos del colegio. Años más tarde, ha pasado lo mismo entre mis empleadas, Una se marchó porque fui al súper y llevé la otra. Era una guerra constante entre ellas y yo. Me acuerdo una vez que hice un postre, con tres sabores de helado, sin darme cuenta al poner en camadas en la taza, una ha quedado con la fresa en la última y otra con el chocolate. Pues me llamaran la atención que no eran iguales. Otra hice y así he resuelto el asunto.

Tube mucho cuidado siempre en la atención que daba a todos, cuando compraba algo para mí, también lo hacia para todos de mi casa. El ejemplo más visible es la empleada que estuvo en mi casa veinte e no sé cuántos años, me haber dejado, porqué salí de mi casa y vine para un piso. No vino nunca a ayudarme. Sin sentido, no aceptó mi compañero. Se ha sentido rechazada.

Lo tengo difícil, ¡sí tengo! ¡Madre Mía! Donde compro mis productos de belleza, si voy a una marca, paso por todas, para saludar las empleadas. Por veces no disfruto, por estar tan atenta a mi manera de estar entre todos.

Algo en mí es anormal, seguro que el defecto es mío.  Mismo conservadora por mi manera de ser, de nunca cambiar el antiguo por el nuevo, me cae en cima tanto celo que ya es persecución incomoda.

Una gatita blanca, que tenía tanto de cariño como de pelo, fue mi compañera diecisiete años, pues mismo de ella tenían celos. Parece que estoy mintiendo, no, es y fue realidad.

Rematando este rosario de cosas que parecen fútiles y no lo son de todo, amargaran y continúan amargando mi vida. Como acostumbro decir yo no soy nada ni de nadie, soy algo que no sé dónde he venido y para donde voy, cuando mis raíces secaren y me muera. Por favor, me gusta que me quieran, pero que no me sofoquen.

Mis brazos abiertos, abrazan sin sentir los espinos de malas intenciones de quien lo hace con maldad.

Para todos y de todos un poco soy. Para mí poco queda, solo la voluntad de vivir en paz y con quien deseo y me hace feliz.

Que vuelvan mis amigos como pájaros que en Primavera vienen de la distancia, sus nidos los tengo guardados para ellos.

Porto, 10 de Setiembre de 2013

Carminha Nieves