Un día un árbol se lleno de bellos frutos, todos ellos tiernos y dulces,
con el tiempo todos los frutos maduraron, unos calleron en tierra firme,
los otros frutos frueron arrastrados por sus propias corrientes.
algunos de los frutos lograron hechar raices sanas y otros se llenaron de alimañas,
los frutos sanos y de buena raiz han dado bellas frutas,
los frutos enfermos tambien dieron frutos, pero unos frutos asperos y enfermos de la raíz,
aunque ambos frutos son herencia de un gran árbol, no todos tienen corazón sensible,
El gran árbol esta muriendo, las alimañas de sus propios frutos se trepan y lo ahogan,
solo espero que el cielo mande una gran tormenta para arrazar con esas alimañas
Ese gran árbol debe continuar vivo, dar nuevos y dulces frutos.
ese gran árbol me ha dado de herencia un corazón sano.
- Autor: borealara (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 11 de septiembre de 2013 a las 16:17
- Comentario del autor sobre el poema: Los hijos que aman a sus padres están al pendiente de ellos, pero los hijos malos solo esperan que a ver que heredan de ellos, si tienes un padre dale un abrazo y cuídalo en todos sus aspectos, porque ellos un día así lo hicieron con sus pequeños hijos.
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 380
- Usuarios favoritos de este poema: borealara, luisa leston celorio, El Hombre de la Rosa
Comentarios2
Hermoso y genial prosa amiga Boreal
Saludos y amistad
gracias por estar en este espacio: ese árbol es mi padre y no todos sus frutos son comestibles: saludos
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