El viento endurece la tierra
Comoe el horizonte que me socava
tu mar es de cristal por la primavera
tu cielo es de esmeralda por la noche
tus hojas son de oro puro,para mi alivio
Mientras tus ojos alcoban mi neblina necia
Nitido es el mar de tu boca
que conquista los pantanos de mis venas
Borrosa remiendo tu figura a lo lejos
Entre el lejano atardecer de un dia que oscurece
Los dias son cuentos nómadas,
mas mi tiempo se asienta a tus labios
Es a lumbrera que marchita
La espada de estupor y prescidio
La tortura que refresca las raícez de mi boca
y revoca las maldades de tu alma
Que permanece viva y dorada en el incendio prófugo
y se rescribe esbelta entre las llamas de mi fuego,
Es a los pétalos que irradian mi pecho
Es la sombra que consume mi lecho tejido de melodías
Es el eco estruendoso que esconde tu secreto
Es el verbo que calla,
es el aforal verde que vaga disperso por las colinas de tus ojos
Y aun los vientos tormentosos permanecen escualidos en tu boca
El manantial de hojas que ciega mi alma va flotando en tu afluente
Como la estrella convaleciente se incendia en mis semillas.
Es el estupor de tu fuego, o quizas un deseo marchito
- Autor: RayodelOriente (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 8 de octubre de 2013 a las 10:07
- Categoría: Amor
- Lecturas: 44
- Usuarios favoritos de este poema: El Hombre de la Rosa
Comentarios1
Un hermoso y sensacional poema amigo RayodelOriente
Abrazos de sincera amistad
Críspulo
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