Te asomaste a mi puerta,
Que experiencia suprema;
Entró el sol deslumbrante
Fue una dicha tan plena;
Que morí en ese instante
Y llegué hasta mi Edén
Donde dije: -te quiero,
Tú dijiste: -también;
Los dos fuimos felices
Por eterno momento,
Y se unieron dos almas
Por un instante eterno;
Pero todo pasó,
Te alejaste ligera,
Muy poco te importó
Que sin ti yo muriera;
Hoy yo vivo infeliz,
Tú vas con tu pareja,
Yo te miro pasar
Buenos días contestas,
Tú te alejas de mí
Yo me hundo en mi dolor:
Para ti fui un instante,
Y tú, mi único amor…
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Autor:
Raúl Gonzaga (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 27 de octubre de 2013 a las 07:33
- Comentario del autor sobre el poema: Heptasílabos con rima consonante en los versos pares; expresan un oasis en un desértico amor...
- Categoría: Amor
- Lecturas: 119
- Usuarios favoritos de este poema: Maria Hodunok., El Hombre de la Rosa
Offline)
Comentarios4
Bello poema y muy triste su mensaje, están escritos de manera maravillosa, poeta amigo, pero llega a tu oasis y olvida el pasado, no vale sufrir por amor, la vida nos regala otras cosas mas bellas. Fue un placer leerte.
SALUDITOS.
Querida amiga, tú eres como ese oasis, a tu lado todo parece un Edén, generas paz y felicidad en todo tu contorno, contar con tu amistad se ha vuelto algo muy agradable y algo muy importante; saludos y un fuerte abrazo fraternal...
GRACIAS.
Hay amores que Dios une y no los separa el hombre, de repente llega, llama a tu puerta, tú le abres, pasan las horas como si fueran minutos y en una calma tan agradable, que no quisieras que acabara ese instante, que se hace eterno: como un sueño del que no quisieras despertar; si tienes la suerte de poderlo continuar, ¡qué bueno!, pero si no; se va y deja ese sabor de boca que nunca pasa y dices como yo, en mi poema: tú, mi único amor...
Hermosa forma de versar tus sentimientos estimado Raul Gonzaga
Ha sido un placer leer tus hermosas letras
Saludos de afecto y de amistad
Críspulo el Hombre de la Rosa
Críspulo, gracias, tus palabras son fuerza de aliento y de superación; saludos y un fuerte abrazo fraternal...
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