Cierro mis ojos y viajo,
por los caminos de la memoria,
hasta tiempos más o menos
lejanos, cuando tomados de la mano
hicimos nuestra aquella playa
invernal.
Sus olas encrespadas rezongaban,
con murmullo y espuma la osadía de
aquel par de locos felices que
cantaban y reían a carcajadas y
lentamente fueron dejando sus ropas,
apiladas, olvidadas, enajenadas
a un costado bajo el vuelo encelado
de las gaviotas cuyos graznidos
fueron música soñada para una
sonata de amor y arena, de pasión
sin penas, sin pudores, ni culpas.
Tú y yo abstraídos del mundo,
mi pecho sobre o bajo el tuyo,
según el turno del rodar sin fin,
sin más objetivo que gozar
el uno del otro como si fuéramos
dos adolescentes escapados
de su cárcel de prejuicios y padres.
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Autor:
Jorgam (Seudónimo) (
Offline) -
Publicado:
27 de diciembre de 2009 a las 14:54
- Comentario del autor sobre el poema: Lindo haberlo vivido, para poderlo contar
- Categoría: Espiritual
- Lecturas:
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Offline)
Comentarios10
Tienes razón, tiene que haber sido lindo haberlo vivido y poder volver a viajar ahí con el recuerdo.
Petonets,
Libra *M*
Siempre gentil Libra. Trato de llenar mi vida con los buenos recuerdos, que los otros se arreglen como puedan, ja ja
un beso
y quien dice que eso no puede volver a pasar...
adolescencia es un estado eso si pero en nosotros esta hacerlo valer y tu lo has hecho con tu recuerdo... hermoso
saludos 🙂
A tu edad querida amiga, la adolescencia es un estado permanente, a la mía es ya un recuerdo...aunque el amor nos hace rejuvenecer y entonces volvemos a rodar por la arena
Gracias por tu comentario
Bellas imágenes,
ya por la inocencia,
ya por la pasión descubierta,
ya por el amor,
ya porque sí...
Un abrazo.
Querida amiga, gracias, tu comentario me halaga, "ya por el amor" por él somos capaces de todo
Un abrazo
Jorge
Escena repetida una y mil veces ¿que tendrá la mar que incíta y propicia -cual Celestina callada- esos amores deshinibidos...? Ay, si las olas hablaran, jeje....
Un saludo amigo, me hiciste rememorar.
Aries
El mar es inmenso como el amor Aries, ambos poderosos, pueden ser calmos o tempestuosos, ambos tienen misterios ocultos, delicias y peligros.
Me alegra que mi poema te trajera momentos hermosos
Jorge
Bellísimo y me quedo con tu respuesta a Mafer. es verdad,
me hiciste emocionar, yo que estoy pasando por una etapa de dulces y perdidos recuerdos.
Me encantó
Gracias amiga, viniendo de tí es un estímulo a mi pluma, los recuerdos nunca están perdidos, duermen su siesta en la memoria con todo lo bueno y malo de ellos.
Procuro aferrarme a los buenos, remedios para el alma, no importa si la historia sigue o acabó, lo importante es que aquel hecho recordado sucedió y lo vivimos con intensidad.
Un placer emocionarte
Jorge
Si vos lo decís, no sufro mas,
buaaaaaaaaaa !!!
JUVENTUD DIVINO TESORO, QUE TIEMPOS AQUELLOS.
TE FELICITO
UN ABRAZO
La clave querida felina, es que ya no eramos tan adolescentes, aunque nos comportamos con el descaro de ellos.
Un beso amiga y una vez más, gracias por tu comentario
Lo que se vive sin sentir, no se puede escribir.
Y menos, en una inspiración Poética.
La arena, debe haber sido el más discreto de los testigos ese día, o, noche, si así lo fue.
El mar en sus mareas borró las huellas, de la arena, pero no, las que quedaron en tu corazón.
Hoy, tu alma escribe lo que el corazón le dicta, trayendo al presente esos bellos recuerdos.
Y de hecho ésta bella Poesía,
Saludos Jorgam,
Alviz Neleb
Gracias amigo, fue a plena luz de la tarde y aunque no lo eramos, nos sentimos los dos como adolescentes, absolutamente, y es muy cierto, si no se siente no se puede describir.
Ubn abrazo y muchas gracias por tu comenario
Jorge
Me encanto tu poema, muy bien construido y transmite muy bien la evocación del ser, me senti trasladado a aquella playa con tus versos. Felicitaciones amigo.
Gracias amigo, cuando los recuerdos son buenos, es fácil volver a ellos
Jorge
sin duda alguna amigo, sin duda alguna, y estoy seguro de que tu tienes unos muy bellos que trasmitirnos con tu poesia como voy comprobando.
Es un buen poema. Lindos recuerdos cargas en la memoria. No importa la edad de uno, siempre habrá buenos recuerdos.
Gracias amigo, el corazón nos acompaña toda la vida, en él está la edad, el envase que cargamos puede envejecer, pero lo esencial, que no se ve, siempre tiene los años que nuestro corazón marque.
Jorge
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