"Las estrellas duermen todas en los ojos
de la serpiente,
cruel silencio de infinitas distancias,
zagas, dormido y asesino".
Mírate el eco propio en los ojos,
sueño al sol levantarse con las alas
y al reloj rompiéndose en la retina
de tu boca acurrucada dentro de la mía.
Aveces seduce mas
mirar al cielo por la noche e irse de aquí,
arrancarse la piel y el suelo
con las unas apartar la carne asta encontrarse
la luz y tomarla con las manos
como a un pájaro de 22 años de jaula
empujarla hacia arriba y verla huir.
Aveces el corazón estorba,
estorba para dormir, estorba para vivir,
para ser feliz..."estorba dios mio estorba".
Aveces el "hay amor mio" de Aute
golpea al golpe y le da aleteo
a las entumidas alas del pájaro pero luego
la canción se muere y regresa la calma.
El suspiro es un premio de consolación per se
una caída mortal hacia el suelo
y de un volver a elevar,
hay un ser mayúsculo sin cabeza y con alas
su victoria la celebran bien los pueblos
y sus guerras han perdido los ojos
y las estrellas otro nido tuvieron que buscar,
los mios, en donde duermen todas ellas,
en donde a la nada me condenan a mirar.
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Autor:
Alexander Jiménez (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 17 de noviembre de 2013 a las 17:37
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 194
- Usuarios favoritos de este poema: esthelarez, RilkeRainer
Offline)
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