Esta mi herida agarrada a mi pecho
tiene abiertas las alas,
de manera que en mi pecho
hay pegadas un par de alas...
en el centro de ellas una herida
como la de una garra
que sangra y lame su sangre
que sabe a hambre.
Es el preludio de la bala,
el caer, el impacto de un cuerpo celeste
de lamidos recuerdos
siento ya el caer del sol,
el romper de las olas en mi pecho desnudo
y el nudo de la culpa,
ni tu mano esta conmigo y me temo que pronto
mi mano ya tampoco estará contigo.
- Autor: Alexander Jiménez (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 18 de noviembre de 2013 a las 19:02
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 116
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.