Y porque te quiero,
No puedo quererte,
Lastimaría tu corazón y el mío,
Se nublaría en cristales rotos,
Tu mirada fresca,
Para dejar dudas de recuerdos,
En soledades atrapadas,
En deseos despertados de llanto.
Y porque te quiero libre, gaviota volando,
No puedo quererte,
Aunque sienta tu cariño,
En brazos de aire.
Te quiero tan mía,
En tu breve espacio,
En este destiempo que me abrió caminos,
Y se descubrieron los mantos de sombras,
Eco que reclama,
En mi voz la tuya,
Con esa ternura que enlaza miradas,
Esquiva recuerdos,
Y me entrega con brazos abiertos.
Sensaciones que un día,
Se escaparon,
Así sin más se fueron.
No puedo quererte,
Te llenaría de besos,
Y en mil frases te daría mis manos,
Me entregaría con sed de caricias,
Tu soledad la volvería mía,
Y la mía en ti encontraría refugio,
¿Quien soy yo?
¿Qué puedo ofrecerte?
Si es imposible convivir conmigo,
Porque ni mi aliento,
Porque ni mi cuerpo,
No puedo ofrecerte ni la hiel ni el vino,
No se si entiendas porque no puedo,
Ni debo quererte.
Autora: Silvia Díaz
- Autor: Carlos Arturo Mendez Diaz ( Offline)
- Publicado: 19 de noviembre de 2013 a las 01:25
- Comentario del autor sobre el poema: Esta poesía de desamor trata de las limitaciones del querer, el porque algunas veces amar a una persona puede resultar dañina y es mejor decir adiós. Además es un escrito cuya autora es mi madre.
- Categoría: Triste
- Lecturas: 33
- Usuarios favoritos de este poema: El Hombre de la Rosa
Comentarios1
Muy gratificante ha sido la lectura de tu bello poema amigo Carlos
Saludos de sincero afecto y amistad
Críspulo el de la Rosa
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