Agua y agua tranquila
que en el calor no se derrite
sino que se agita.
Agua y agua de suerte
que en el desierto
te salva de la muerte.
Agua y agua de vientre
que de ese mundo tan noble
sólo te queda nacer.
Agua y agua de río
que de tanto hechar piedras
desvías el camino.
Agua y agua maldita
que de entrar en ella
te vas a ensuciar.
Y por fin:
Agua y agua de amor
de la que una vez mojado
ni de las penas te quieres secar.
- Autor: RRomero (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 22 de noviembre de 2013 a las 13:47
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 36
- Usuarios favoritos de este poema: El Hombre de la Rosa
Comentarios2
Gratificante la lectura de tu hermoso poema amigo RRomero
Saludos de afecto y de amistad
Críspulo el hombre de la Rosa
HERMOSO!
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