Negras sombras de muerte
cabalgan sobre Granada.
Los asesinos meditan
en los abismos del alma:
¿Cómo a la clase enemiga,
de una vez y para siempre, eliminarla?
Traen lecciones aprendidas
de la lejana Alemania
y dineros a escondidas
de la más cercana Italia.
Sólo una clase política,
llamada "Totalitaria",
debe guardar la vida;
la vida debe salvarla.
Los asesinos andan sueltos
por la Vega de Granada;
si el cura no te bendice:
¡Ni Dios te salva!
¡Matar, matar, matar, matar...!
La contraseña está dada:
"No quede piedra con piedra
sin remover en la casas".
Los criminales-piadosos
han formado sus escuadras.
Van gritando: "¡Voto a Cristo!",
con el fusil a la espalda.
Sombras de miedos se extienden
de la noche a la mañana.
Hay que arrancar de raiz
toda la hierba mala.
Dios sonríe desde el Cielo
al comtemplar la matanza:
una tormenta de sangre
se pasea por España.
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Autor:
luismaria ( Offline)
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Publicado:
26 de noviembre de 2013 a las 14:35
- Comentario del autor sobre el poema: Este poema es uno de la serie que estoy escribiendo sobre la Guerra Civil de 1936, centrando el tema sobre la sublevación cívico-militar-católica en Granada.
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas:
50
- Usuarios favoritos de este poema: Juan Senda
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