No quisiera yo esta tarde
arrullar con mi tristeza,
Mas no hay cuentos de princesas,
Ni promesas que yo guarde.
Las palabras que como aves
Sobrevuelan en desorden
Se entremezclan en el cielo
Nubes blancas las esconden.
Reo su peregrinaje
Las persigo con cautela
¡vuela el alma, el alma vuela!
Sin un rumbo ni equipajes.
Verso barroco y salvaje,
que hoy, la nada, encarcela.
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Autor:
Matias Ezequiel (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 9 de diciembre de 2013 a las 05:23
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 83
- Usuarios favoritos de este poema: El Hombre de la Rosa, Sara (Bar literario)
Offline)
Comentarios2
Muy grata la belleza de tus lindas letras amigo Matias
Saludos de amistad
Críspulo Cortés Cortés
El Hombre de la Rosa
Gracias por apreciar estas humildes letras!
Saludos 🙂
y que el vacío, libera..
:3
Exacto!
Gracias por tomarte el tiempo de leer este soneto fugaz,
Saludos Sara! 🙂
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