TRISTEZA DECEMBRINA (RELATO)

Que triste estos días, en el que todos celebra, comen y brindan. Usan ropas elegantes, se adornan como si fuesen salas y se dan regalos por cumplir con el estereotipo. Eso no lo es todo, no, me entristece aun más que muchas de esas personas no tienen nada, no poseen bien alguno, derrochando lo que no tienen. Si ellos, andan en bus, evitan comer en la calle y se alimentan de lo mismo todos los días, una y otra vez, ayer hoy y mañana…

¿Navidad? navidad es una ilusión, una utopía creada para engañar a los niños, hacerles creer en una fecha especial donde reciben algo sin nada a cambio pero todo en la vida tiene un costo, lo regalado/gratuito es una estafa publicitaria. ¿Filantropía? No me vengas a mí con esa majadería, todos sabemos a que va todo eso.

Intento mantener la sobriedad de personalidad para estos días, ser el mismo de siempre sin caer en el cliché decembrino. Despertar e ir olvidando poco a poco lo soñado, cepillarme, ducharme, comer algo para no desmayar de manera imprevista, leer un poco hasta la llamada del alba a mi ventana invitándome a salir de casa. Salir, tomar un poco de aire y lamentarme poco a poco del contaminado aire de emociones que intoxican mis pulmones y me mantiene en este estado de tristeza contenida. 

Ya no me incomoda el baño de mirada de esos hipócritas porque me rehusó a jugar su juego, no usar ropade marca y sonreír como si hubiese ganado a la lotería. No me molesten, estaré en el rincón de la sala viendo como el hielo de mi trago de ron barato se consume al igual que mi sobriedad en cada una de estas falsas noches.

Que triste, que triste de verdad, estar escribiendo estas letras mientras el resto creen ser felices por estar tomando coñac.