(I)
Mientras giren y giren las aspas del molino.
Mientras volteen alentadas por el ímpetu de un viento
que aletea impregnado y esparciendo
la mayor de las desdichas,
la que asociándose al yo pérfido
se afianza en los propios intereses hasta coronar
en la encadenante soledad del individuo.
Mientras un afán desmedido de poder recabe en los hombres
y estos hombres vivan desentendidos del infortunio del resto,
de sus fatalidades y de su terrible desconsuelo.
Mientras... La palabra perdición, demoledora,
recaerá como sobrenombre afeando las virtudes de esta tierra.
Y el sabio decir de cualquier honesta sonrisa
se nublará no obteniendo símil o sinónimo; digna respuesta.
Y el ánimo que acompaña a nuestro paso
se consolidará con un mirar huraño,
ajeno a suertes cercanas serpenteará envenenado,
ceñido al hábito extremo, a un claustro limitado,
ensalzará a la miopía y venerará al fracaso.
Mientras sujetemos al consumo como tabla salvadora,
creyendo que los bienes que se obtienen
representan y sostienen la liberación de deudas propias
y una felicidad sujeta al heroico equilibrio.
Mientras... Seguiremos estando bajo el yugo de un tirano
que reclama nuestro tiempo y nuestra sangre,
con su cruel deambular, tenazmente opresivo.
Ante el ansia inagotable de consumo, (fuga cobarde y esporádico viaje, viaje plagado de banales proyectos y de un corto destino)... Nazco preso y muero pronto, al no reconocer lo que de veras es sentirme vivo.
(II)
Sobre hoy:
Cuando los hombres vivimos olvidados de la importancia de cada segundo.
Cuando desaprovechamos la irrecuperable salud para amasar posesiones.
Cuando, incansables, releemos considerando grandes obras los pasajes que convergen dando el visto bueno a los mayores absurdos.
Sobre un hoy:
Donde la paciencia sufrió la obsolescencia y cualquier rechazo, aún sin razón de peso, gritando violento se consolida... es idolatrado, al sufrir de la hipnosis provocada por unas palabras bien escogidas que surgen de las bocas de unos individuos con retocados rostros cuales respaldan hipócritas propuestas escudándose tras siglas engañosas que varan en el falso significado.
(III)
Y queda hecha añicos la confianza.
Y ya resultan mofa del ciudadano cada una de las palabras
que recitan pronta bonanza,
que resuenan por la boca de diputados
sobre el estrado del congreso.
Palabras sometidas a la hábil argucia.
Citas que esconden enorme sarcasmo,
junto a ironía y felonía e hirientes falacias.
Argumentos que dicen defender los intereses
de un pueblo ya suficientemente malbaratado
por ese mismo conjunto que, comodamente
apoltronado, implanta las leyes.
(IV)
Sobre la irresponsabilidad, la deshumanización y la falta de conciencia:
Cuándo machacamos la piedra solvente y filosofal hasta llevarla al polvo más insalubre, estéril e insolvente y adusto.
Cuándo desaprovechamos o enrevesamos el pasar corto, nuestro o de otros, de esta vida, dejando a la felicidad; tristemente asociada al lucro, al gasto innecesario que se atisba en el excesivo consumo.
Así y aquí: siglo veintiuno.
Intoxicados por esporádicos e insatisfactorios orgasmos
seguimos incompletos; podridamente perdidos.
Acarreando la lepra de nuevas y fútiles tendencias,
masacrados por inútiles dependencias y fatales vicios.
(V)
Mientras tanto el molino trille cereales
sin separar la cáscara de la simiente.
Mientras el infortunio se alimente
de la frágil voluntad de nuestro ser;
y abatiendo su cuerpo y alineando su mente,
deslome hasta llevar a un imposible
un futuro lleno de pródigos proyectos
que exclaman esperanza.
O inclusive nos aprese el infortunio
por, al deambular adormecidos,
banalizar hasta vetarle,
tanto a la senda como al horizonte,
los joyosos valores que resguardan bonanza.
(VI)
Un látigo sigilosamente zigzaguea;
sisea encantadoramente,
hipnotiza y nos atiza,
nos flagela sin contemplaciones,
cuentan sus notas sobre la esclavitud,
delata que hay amos y presidio.
" La justicia en la tierra nunca nació,
todavía resulta neonata, por ello hoy me veis vistiendo de luto."
(VII)
Abundan los cortinajes,
espesa es la bruma,
ceguera causa la niebla.
Tercos se afianzan, ¡cambiantes!,
amplios y sutiles se muestran los términos
que dan pie al esclavizaje.
Más tercos que una mancha de aceite
o el óxido de hierro impregnado en la ropa;
acerada se presenta esta esclavitud;
inconsistente e irreal es esta nuestra democracia.
Tan inolvidable por indecente
como hipócrita por continuamente versar mentiras.
Es tan increíblemente genuina que
a la perfección disimula sus fundamentos
hasta padecer de invisibilidad.
Disfrazada de urnas y papeletas,
la democracia se convierte en autocracia;
un símil de la dictadura
cuando, debido a la suma de votos,
conviene siendo absoluta.
¡Una burda farsa!,
porque un sinfín de propuestas
cabidas en el electo programa
se difuminan y quedan menos que en nada...
como hojas rotas de periódico,
siendo papel higiénico en sucio retrete público.
(VIII)
Por más que duelan prosiguen,
suenan simulando ser cantos angelicales tantas promesas.
Suenan y resuenan
retransmitidas entre discursos de tono elegantemente sobrio,
mediando, como publicistas,
los abyectos y diversos medios de comunicación.
Y aquellas verdades que resultan desgracias cotidianas
en buena cantidad de hogares
arrecian maquilladas, a medias o restringidas,
según sea el rostro y la corpulencia de los medios que las relatan.
(Hay días de fiesta en que alardea el teatro.
Es grande el teatro que invade los corrales y palacios.
Y fallece la decencia junto a los inocentes.
Y los farfulladores histriónicos consiguen enmarcar sus rostros,
convenientemente afables e interpretativos
y falsamente solidarios, por todas partes).
(IX)
Ya hace unas cuantas décadas que apareció implantándose
un nuevo método de baile.
Cual repetimos, insolentemente, una y otra vez,
aún faltando el permiso de muchos;
siguiendo los desgraciados y desagradecidos compases
de una danza macabra.
(Esquivas batutas marcan las directrices...
y enferman en un rápido tránsito,
innecesaria y remediablemente,
enferman hasta la muerte,
débiles peatones, frágiles y aún imberbes.
Y estallan guerras donde la paz sería
la mejor herramienta para el avance,
la mejor propuesta; el corcho que flota y que salva).
En este baile, baile de máscaras,
la libre elección hizo acto de presencia
pero se quedó adormecida...
espera envuelta entre cortinajes.
318-omu G.S. (Bcn-2013)
- Autor: omu (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 1 de enero de 2014 a las 18:09
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 1600
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