Cuando yo era joven ¡parece que fué ayer!
cuando dieciocho años yo tenía,
el mundo entero a borbotones me comía
y toda mi obsesión era correr.
Correr, correr, correr…
Vivir la vida atropelladamente,
un pequeño receso para dormir y otro para comer
y el resto era vivir intensamente.
Tenía que llegar a donde fuera
antes que los demás. No debía permitir
que nadie se me adelantara a mí
y pudiera ganarme en la carrera.
Mi única obsesión se resumía
en intentar alcanzar mil objetivos,
todas las experiencia que yo soñar podía
y escribir la palabra: "conseguido"
Ahora que ya soy viejo,
ahora que ya he superado los setenta
de mi maltrecho cuerpo sigo su más sabio consejo
y a los dictados del espíritu tengo siempre en cuenta.
- Autor: donbuendon (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 15 de enero de 2014 a las 03:56
- Categoría: Espiritual
- Lecturas: 461
- Usuarios favoritos de este poema: nelida anderson parini, , El Hombre de la Rosa, CHILENOHOT
Comentarios2
Cada tiempo y etapa tiene su propio afán y propósito sin ellos nunca llegaríamos a madurar interiormente ... Los bríos impetuosos de la juventud nos conducen a la prudencia durante la adultez, misma que a través del tiempo y la experiencia desarrolla la espiritualidad...
Abrazos sonrientes con mis saludos y mejores deseos para ti.
Feliz y bendecido día.
Hermosa y agradable la lectura de tus letras amigo Donaciano Bueno
Grandioso tu poema
Saludos y amistad de Críspulo
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