Como padre y madre... alto;
Rubio, con cara de pillo;
Son apenas cuatro años
Pero aparenta los cinco.
Naciste cuando el abuelo
En la facultad estaba;
Junto aquellos jovenzuelos
Con los que se codeaba
Fue una sensación extraña
De repente... abuelo ser;
De la noche a la mañana
¡No me lo pude creer!
El caso es que este asunto
Ya no tuvo solución;
Por lo tanto: "siempre juntos"
A la menor ocasión.
Los pañales, a mis hijas
Nunca les llegué a cambiar;
A mi nieto, con fatigas
Me tuve que acostumbrar.
Y a dormir sobre mis brazos,
Que son tu mejor colchón;
Después, los primeros pasos,
Apoyado en mi sillón.
El tiempo pasa deprisa;
Ya incluso sabes hablar;
Provocando las sonrisas,
A tu alrededor, ¡ galán !
¡El colegio no es castigo!
¡Nos debemos separar!
Para que aprendas los libros
Y no pares de jugar.
Pero el abuelo a las cinco
Te tiene que recoger;
¡Hoy jugaremos al circo!
O a lo que sea menester.
Tampoco faltan los cuentos;
Algunos son de verdad;
El resto me los invento...
"Peter Pan" para empezar.
Cariñoso, pillo, noble;
Con esa sonrisa eterna;
Presiento que a los amores
Los llevarás de cabeza.
Crece despacio, que ahora
Me toca a mí disfrutar;
De tus aventuras, todas
¡Te quiero ver madurar!
Y vivido lo vivido;
Lo que reste por vivir…
Al destino le suplico:
¡Qué te deje sonreír!
abuelopepe
- Autor: abuelopepe (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 28 de enero de 2014 a las 05:35
- Comentario del autor sobre el poema: Hoy os presento a mi nieto Rubén, en esta "chocheante" creación que hace tiempo le debía. Espero que os guste, o al menos os haga sonreír. Os deseo un feliz día!
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 30
- Usuarios favoritos de este poema: Maria Hodunok.
Comentarios5
Nos hace enternecer, poeta, a los hijos no hay tiempo de disfrutarlos, pero los nietos son una bendición y lo expresaste de manera muy dulce en tus versos.
Es un placer leerte.
CARIÑITOS.
Así es María. Y yo tengo la suerte de tenerlos cerca y disfrutarlos a menudo. De todas formas hay que ver como somos; yo antes cuando un abuelo o abuela me contaba todo lo que hacia o no hacia su nieto-a, pensaba: ¡hay que ver que exagerado-a y que pesado-a se pone! , y ahora...
Abrazos del alma
Yo no tuve la fortuna
de ser padre amigo mío
pero al leerte he sentido
que he acariciado la cuna
de ese nieto que tenés
Enrique, no lo descartes, cualquier día te toca a ti la lotería, y te vas a enterar! jaja
Ya en serio te digo que todo va tan deprisa que de repente te encuentras delante de ti a un renacuajo que te llama "yayo" y te preguntas ¿cómo ha podido suceder esto si yo todavía ando en pañales?
Un abrazo, amigo y gracias por tu visita.
Es un gusto asomarme a disfrutar tus letras
Abrazo
El gusto es mío al poder contar con tu presencia en mi humilde rincón.
Un beso y te deseo que tengas un buen día
Preciosa poesía como precioso ese amor a tu nieto. Curioso que muchas veces podemos dar a los nietos todo el amor que no supimos o no pudimos dar a los hijos. Afortunados los abuelos, afortunados los niños que los tienen.
Saludos.
Muy lindo tu regalito de abuelo!
Que disfrutes mucho de tu "abueletud"!
Un gran abrazo, amigo!
Raúl Daniel
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