Es un padre con potestad de absolutismo,
con la virtud de los mortales,
y sueños por precipicios,
por la ironía en mil y tantas deidades,
que claman vicios.
Es un camino agreste,
de cortantes minerales,
y en los destellos la codicia,
y en el dolor yacen los males.
Es un coralino suelo,
de agua salina sofocante,
con la tormentas bajo el cuello,
y la fatiga un estandarte.
Una madre que re-pare,
y en vuestra muerte
dolores nos mitiga,
Hacia el fuego de un fornido fénix.
Y en nuestro corazón yace su nido,
y en la razón carga un vecilio,
y en el amor una partida.
- Autor: Martinez Deschamps (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 12 de febrero de 2014 a las 02:21
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 54
- Usuarios favoritos de este poema: El Hombre de la Rosa
Comentarios4
Muy hermosas y gratificantes son tus preciadas letras amigo Gustavo
Saludos de amitad y afecto...
Críspulo el Hombre de la Rosa...
Buen poema amigo gustavo me gusto mucho.
saludes y abrazos
Gracias a cada uno de ustedes por el trabajo y tiempo que tomo dedicarle un poco de sus ratos.... es muy difícil referirnos de la vida tanto incluso que de veces las palabras en su estética se quiebran.
Sublime poema hermano mio bastante sabio, intelectual y profundo uff !! fuerte fuerte !!!
compa muchas gracias... tu sabes es sumera importancia, mas que comprender; no dejarse sofocar en los vapores del camino
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