Este dolor es la fuerza que me trajo
A vivir este mundo de luz y terciopelo.
Este dolor es la voz escondida
En el grito de cada mañana;
Las melodías que llegan a tus oídos,
No lo dudes, es mi voz
Llamándote, amándote, amada.
Este dolor me hace recorrer
Tantos trayectos para alejarme
Pero en la soledad tu mano me alcanza
Y me tiene postrado en el mismo sitio,
En el mismo llanto, y sediento,
En medio de un oasis descolorido.
Este dolor es mi casa y en mi casa faltas
La playa, la familia, las fiestas,
Los amigos, a todos les faltas.
Mis noches de insomnio y soledad
Son largas,
Parece que el dia nunca llega
Y, en la oscuridad, el miedo me abraza.
La maldita monotonía de siempre y en el espejo
Una mujer grita desesperada.
Mi recorrido en autobús de cada mañana,
Mi deambular en pleno llanto
Gastando madrugadas,
En todo apareces, como una maldición.
Mujer, niña, dulce, inmaculada,
En mi cuerpo, tu no estar, se hace llaga.
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Autor:
santiago calderon (
Offline) - Publicado: 13 de febrero de 2014 a las 04:02
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 48
- Usuarios favoritos de este poema: El Hombre de la Rosa, Viento de amor, Raúl Daniel
Offline)
Comentarios1
Muy hermosa y grata ha sido la lectura de tus letras amigo Santiago
Saludos de sincera amistad
Críspulo el Hombre de la Rosa
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