En este infinito universo:…
El tiempo trascurre lento,
en tus callejones se atesta
de algarabía, que lleva
con juicio el viento día tras día.
Al amanecer y sin cesar
a mediodía, siguen,
Navegando en el aire
valijas de temor y alegría…
Al sonar las campanas
al terminar el día,
Llega la noche desventurada
al oír en silencio:
la maldad y la mentira.
La noche es testigo,
De aquellas personas caídas,
Que por culpa de una bala
propulsada por una esencia casi podrida.
Aquella que rasga el silencio
al viajar por el cielo,
Para cumplir con su voluntad.
Llegando a su destino y penetrar,
Y acabar con la felicidad de la vida.
¡¡Ah pobre vida agonizante…!!
La brisa frívola ambulante
va aprisa por el aire,
<<Ebria de tristeza>>
Descontrolada perseguida
por los celajes tristes
escoltas del brillar de luna.
Abriendo camino hasta
colisionar con el alma
más escondida.
Para emitir la lúgubre
emoción de cada día.
- Autor: Horus (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 2 de marzo de 2014 a las 23:17
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 49
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.