Me duele el pecho, me falta el aire, me engaño diciendo es el exceso de cigarrillos.
Nunca en mi vida he sido un hombre religioso ni de santos,
hoy rezo ante una Virgen, implorando no te alejes.
Tan parecido es esto a la muerte que me orilla a rezar.
Ni siquiera permitiste ser en tu vida algo fugaz,
sin embargo hice una vida a tu lado en mis fantasías.
Sólo te volteas, me das la espalda y siento tu frialdad.
Como si yo tuviera la culpa de los traumas pasados,
Como si yo tuviera la culpa de habernos cruzado,
Como si yo tuviera la culpa de amarte tanto.
Como si fuera yo el único culpable.
Te digo no quiero verte nunca más en vida,
deseando te quedaras en ella hasta el último de mis días,
Te digo que te odio tanto que desearía murieras,
anhelando morirme en tu lugar, a tu lado.
Porque después de todo
tu no sentiste nunca nada por un soñador,
porque después de todo
tu nunca valoraste un sentimiento real.
Porque despues de todo
tu no llorarás como yo.
- Autor: ZRKO (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 3 de marzo de 2014 a las 13:28
- Categoría: Carta
- Lecturas: 46
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