Lanzadera de sueños y de ideas, lanzadera,
caprichosa señorita voluble y casquivana,
que tal como apareces te vas cada mañana
pero que nunca permaneces a mi vera.
A mi llamada tu respondes con la espera,
ausente siempre de caridad cristiana,
¿por qué eres grande y a veces tan enana
odiosa lanzadera huidiza y puñetera?
Hoy ayuda te pido para versar este soneto
de palabras vago, vacío, de ripios repleto,
por favor no seas tan arisca y tan esquiva.
Lo que deseo es lanzar un canto a las ideas,
que lo que yo digo creas cuando tu me leas,
haz a mi mente más lúcida, sagaz y creativa.
- Autor: donbuendon (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 13 de marzo de 2014 a las 05:31
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 64
- Usuarios favoritos de este poema: nelida anderson parini, El Hombre de la Rosa
Comentarios2
Esquiva inspiración que muchas veces nos rehuye, reduciéndonos a la impotencia... Que cierto es lo que planteas mi querido amigo, sabes pocas veces intento escribir sobre un determinado tema o en una forma en específico, pues cuando así lo hago, algo tan corto como un soneto, que normalmente no me toma más de unos cuantos minutos escribirlo, puede llevarme hasta una hora, para luego no agradarme y desecharlo. Así que por lo general escribo a la libre, dándole espacio al verso de fluir libremente, pero cuando se atasca ¡Madre mía! no hay quien lo mueva jeje 🙂
Un fuerte abrazo sonriente mi querido poeta, buen día.
Hay quien escribe los versos
en un plis-plas, sin darse cuenta,
para quien la musa es cruenta
y le deniega sus besos,
también yo pertenezco a esos.
Consuélate. Un abrazo
Un placer pasar por tu hermoso soneto amigo Donaciano
Saludos de sincera amistad y afecto
Críspulo Cortés Cortés
El Hombre de la Rosa
Muchas gracias por tu comentario. Compruebo que sigues vivo y coleando y dispuesto a seguir dando guerra. Un abrazo
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