Oscuro fondo negro
donde las letras, parecen dientes
de una boca, que dice...
las palabras que lees en mis ojos.
Palabras, que son brisas desordenadas
moviendo enloquecidas hojas
desheredadas de mis manos
privadas de toda razón.
Bajas la vista, de ellas
tratando de ignorar la lógica
de estas cosas que son...
lo aparente, la realidad.
Mientras mis manos tiemblan
dejando caer en el olvido
infinitas palabras
que jamás serán dichas.
- Autor: Esteban Couceyro (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 17 de marzo de 2014 a las 13:24
- Categoría: Surrealista
- Lecturas: 119
- Usuarios favoritos de este poema: Luzbelito, santos castro checa
Comentarios2
Pero siempre nos queda la guarida de un poema para poder deshagornos...Un placer leer tus letras, estimado poeta. Recibe mis cordiales saludos y un gran abrazo.
Luzbelito
Gracias por tu comentario..., es que aveces no alcanzan las palabras y el alma queda corta, ante la realidad.
Un abrazo
Esteban
Habrá que buscar o inventar otro tipo de lenguaje, entonces. ¿Desafío o utopía de un poeta? Un fuerte brazo, gracias a tí por compartir tu poesía y los rincones de tu alma.
Luzbelito.
El nuestro, es un idioma complejo de matices, plagado de ironías, tan pródigo en la calificación como evasivo en el destino.
No encuentro otro, para maldecir, descalificar y hasta ensalzar la locura del amor.
Si me lo sacan, solo me quedaría el grito y los gruñidos, hasta podría aullar como un perro..., en fin poco tardaría en inventar un espacio libre y unas letras.
Somos inevitables, a pesar de nosotros mismos.
Que mi mano se materialice en tu pantalla.
Esteban
El pensamiento es intenso e infinito. El lenguaje diverso y tambièn inagotable. No sabemos cuando empiezan, ni cuando acaban. El que es poeta o el que intenta serlo, podrà entender esto que hoy te digo con el corazòn en la mano.
Te felicito, compañero, seguiremos en la busquedad de lo indescifrable. ¡Suerte infinita!
Rudavall
Esa diversidad, que anida en nuestro pensamiento, crea realidades que se desprende como ramas de un árbol.
Pero hay veces que esa realidad se torna invisible, como el elefante dentro del sombrero, del Principito
Vivir es sencillo, si solo respiramos, el asunto se complica cuando pensamos.
Un abrazo
Esteban
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