Es el viento, la calma, el bostezo del sueño despierto.
Es el insomnio, la duda, el delirante amor por una mujer.
La inspiración nace con un bolero a media tarde.
La inspiración vive con un Javier Solís a media voz.
Es el agravio, la vanidad, el secreto mal guardado.
La inspiración muere, sí, muere, cuando no hay más.
Es eso, aquello… es esto.
No hay más.
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Autor:
Damian Santarossa (
Offline) - Publicado: 20 de marzo de 2014 a las 14:29
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 57
- Usuarios favoritos de este poema: Hadassa..., alicia perez hernandez, santos castro checa,
Offline)
Comentarios4
Ciertamente... si no hay inspiración esto o aquello nos da igual... Pero que nos devuelvan a ELVIS.... Je je je je je
Jajajaja. Elvis no murió, solo volvió a casa jajajaja. Muchas gracias por pasar. Saludos
Verás Damián, que la inspiración podrá dormir un tiempito, pero la vida siempre te dará suficientes motivos para ese despertar de tu pluma, no escribimos por lo que tenemos sino por lo que soñamos, y sueños, sueños nunca faltarán al sentimiento de un Poeta.
Un beso para ti.
Diluz
Es verdad, es verdad. Esa fantasía nunca deja de faltar. Muchas gracias por pasar. Saludos
Muere... cuando no hay más, pero no es el caso pues esta ingeniosa tu poesía con gracia ...
Un saludo!
Muchas gracias Anne por tu visita y por tu comentario. Saaludos
Es esto... TAN BELLO
EN UN POETA NUNCA MUERE LA INSPIRACIÓN
SE DUERME PERO LUEGO DESPIERTA
abrazos y saludos
Muchas gracias Alicia por pasar y comentar. Saludos
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