De rodillas ante su cama.
Sus manos entrelazadas, aprietan
suavemente su pecho.
Eleva la mirada y, con voz ronca, exclama.
─ Mi Dios, no lo tomes a mal. Ella,
me acaricia. Ellos, me han manoseado.
por: matteo 06/04/2014
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Autor:
Matteo (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 6 de abril de 2014 a las 22:48
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 78
- Usuarios favoritos de este poema: Maria Hodunok., alicia perez hernandez
Offline)
Comentarios6
sentidas frases, excepcional poema.
Que fuerte, excelente poema.
Quiero entenderlo!
Conmovedor, amigo, realmente conmovedor.
Me encantó leerte.
CARIÑITOS.
el arrepentimiento es liberador
y tus versos esperanzadores
mis abrazos mi bello amigo Matteo
Tiene mucha garra impactante y una fuerte reflexión.
Saluditos de
Carmen.
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