Tiempo sin darme cuenta de cómo se siente
Sin saber si era inminente
El compás de mis pasos se altero
Perdí el equilibrio entero
Mi corazón latía sin cesar
La sangre corría por mi cuerpo sin encontrar un lugar…
Caminaste hasta donde yo estaba
Yo platicaba no preste atención, solamente no escuchaba
Te vi primero, sacudiste tu larga cabellera negra
Me observaste y sonreíste
Fue como un golpe que no duele
Como un cuchillo sin filo
Como un disparo sin bala
Fue sorprendente el sentir de tu mirada
Esa sonrisa perfecta con dientes cristalinos
Esos ojos negros como la noche
Esa nariz curvea
Ese cabello semi rizado, largo, admirable
Ese cuerpo de mujer.
Respondí a tu sonrisa y asimile tus gestos
Contacto ojos a ojos, inesperados
Seguiste tu camino y yo no te quite la mirada
El golpe a mi alma se desvaneció
Reaccione a las voces de mi acompañante
Seguimos nuestro camino como cualquier andante
Pero no te olvidaba…
Te busque para tratar de volverte mi amada
Para tenerte siempre en mi mente y no solo en mi mirada
Pero por más que trataba, por más que buscaba
Tú, mi amor ya no estabas.
El tiempo pasó
Calculo yo, como 35 minutos en mi vida trascendió
Justo cuando me iba
Justo cuando por rendido me daba
Muy a lo lejos te vi
Camine para volverte a sonreír
Levante mi cabeza y tú
De nuevo volviste a huir.
-
Autor:
JO" (Seudónimo) (
Offline)
- Publicado: 14 de abril de 2014 a las 00:20
- Categoría: Amor
- Lecturas: 138
- Usuarios favoritos de este poema: luis garcia1994
Comentarios1
la fugacidad de la vida tiene su parte inquietante
esas pequeñas cosas que el destino te juega tu sabrás si ganar o perder
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.