Traeme esa tarde, café;
que me cobije ese aire,
esas sus lineas marchitas de arte,
y sus tactos invaluables.
Traeme esa tarde, café;
donde comía canciones,
desayunaba unas cuerdas oxidadas,
y cenabas sus anecdotas, de mis amigos viejos.
Traeme esa tarde,
y por favor no me sueltes,
que tu aroma me mantenga alli,
y tu textura me deje saborearles.
Traeme esa tarde,
donde cada uno garabateo mis alas,
enseñandome a volar,
con cada nota de sus cuerdas.
Café maquina del tiempo,
un suspiro me retorna,
y me encuentra sonriendo,
traeme esa tardé,
y saludame a mis viejos.
- Autor: Amatlam ( Offline)
- Publicado: 24 de abril de 2014 a las 05:06
- Comentario del autor sobre el poema: Unas letras a todos esos mis robles traperos de su tiempo, quienes sin darme cuenta se convirtieron en mis maestros de mi compañera que se convirtio en mi alfombra mágica,mi guitarra; esas tardes que tanto disfrutaba sin darme cuenta,sus anécdotas de todos colores que me hicieron sentir parte de de cada uno de ellos como las flores nacen por que si en primavera, los viajes, los aplausos, los consejos de un arbol de antaño, y el aroma del grano que pintaba mi garganta para seguir cantando mientras respiraba ese olor de la tierra, la madera,la guitarra, la mujer, el café..
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 77
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