Estimados amigos de Poema del Alma: Debido a vicisitudes muy extensas de relatar me vi alejado de la página, hoy intento regresar, paulatinamente iré subiendo algunos poemas que ya publiqué, por lo que les pido paciencia, pues es por ahora todo lo que puedo hacer, gracias por vuestra comprensión.
Carta A Mi Tía Luisa (para ser leída en el cielo)
Te fuiste sin avisarme
(aunque sabía que lo harías).
La última carta de mi madre
me trajo la necro-noticia...
y después de algunos días
estoy con ganas de hablarte...
¡Claro!, será en el espíritu,
de otra forma no podría,
y, Dios mediante, ¡en el verbo
alado de mi poesía!
¡Mi querida tía Luisa...!
que transitaste la vida
sin hijos y sin marido,
renunciando a tus derechos
por un servicio abnegado
a tu madre viuda y enferma
y a esas tiernas, huérfanas
criaturas: tus hermanos...
y tal vez, ya por costumbre,
a todos... dándote y dando...
Tu tiempo se fue pasando
y me tocó una gran parte
(como sobrino y ahijado).
¡Cuán mal que te he pagado,
siendo aquél que más amaste!,
fuiste tía, padre y madre
¡y nunca me reprochaste!
Hoy prefiero recordarte
antes de estar jubilada,
en tus mejores momentos,
cuando más te prodigabas,
en mi escuela primaria
(como ordenanza y portera),
¡cuánto orgullo que me daba
ver que todos te querías
y ponían por ejemplo!
Servicial, dispuesta, amable,
¡nunca se te oyó gritar
ni exhalar ninguna queja!,
al contrario, dabas gracias
a Jesús, siempre y por todo,
consiguiendo de ese modo
ser digna de toda confianza,
pero para tu desgracia:
también ¡bastante envidiable!
Y hablaron mal de ti...
(los de siempre, los mediocres),
pero tú igual los amaste
y serviste sin reproches...
y aunque austera y sin vicios:
¡fue el servicio tu derroche!
No predicaste tu fe,
tu vida fue el testimonio,
nunca hablaste del demonio
(tal vez no lo conociste),
¡tan ocupada en dar!,
que en hechos y no palabras
al Evangelio me diste...
Haciéndome la comida,
protegiéndome en tu casa,
lavando y planchando mi ropa,
regalándome hasta plata,
¡toda palabra me es poca
y se anuda mi garganta!
Hace mucho que no estamos
compartiendo nuestras vidas,
pero sigues a mi lado
como patrón de medida;
para saber te comparo,
cuando quiero entendimiento
en cuestiones de egoísmo,
piedad o desprendimiento;
aunque ausente, eres mi espejo
de descubrir la mentira...
Yo no sé muy bien los tiempos
ni el rigor ni las sazones,
pero sí las condiciones, precio y calidad
que estipuló el Maestro:
Amor, Esperanza, Fe,
Misericordia, Justicia...
¡Nos veremos otra vez,
con toda seguridad!
(Y será una eternidad
que tu amor devolveré).
- Autor: Raúl Daniel (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 10 de mayo de 2014 a las 01:55
- Comentario del autor sobre el poema: Mi tía-madrina Luisa Larsen, mejor que padre y madre, solo un poquito menos que Dios. En la foto con mi hijo Daián. En mi casa, antes de mi divorcio..
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 1256
- Usuarios favoritos de este poema: miriam quintana, Hugo Emilio Ocanto, la negra rodriguez
Comentarios5
Sin palabras esta bellísimo en todo su esplendor saludos amigo felicitaciones.
Gracias Miriam, por tanto calor en tu comentario.. me estimulas a no cejar..
Un gran abrazo fraterno..
Raúl Daniel
Hermoso homenaje a tu querida tia, mi hermano Raul, un abrazo grande para ti poeta
Fue un ser extraordinario.. Yo quisiera llegarle a los talones..
Muchas bendiciones..
ELLA LA LEERÁ EN SU CIELO Y MIL GRACIAS TE DARÁ... PROTEGIÉNDOTE Y ANIMÁNDOTE A SER MEJOR CADA DÍA
FELIZ FIN DE SEMANA
ABRAZOS DTB
Gracia María por tus cálidas y amorosas palabras..
Dios te bendiga a ti también eternamente!
Un gran abrazo fraterno.
Raúl Daniel
Ay amigo. cuantas vivencias nos trsdmtes a través de tus letras, de verdad son cosas a veces comunes pero que copbran umportancoa por lo que dejan en nuestra identidad.
besos,
Así como dices es Silvi.. es que hemos trastocado tanto los valores!.. hasta que a veces por un pedazo de piedra (que decimos que es preciosa) se ha llegado a quitar la vida a un ser humano.. Para mí es más importante un beso o una caricia que un zafiro o un rubí.. por más chiquitito que sea el beso o la caricia.. por más grandes que sean las piedras!
Te envío un fuerte abrazo!
Raúl Daniel
Siento mucho lo de la temprana partida de ese ser, parte inigualable de tu vida; siento lo de tu separación de tu compañera.
Amigo y hermano: te doy mi mano y mi alma. Te comprendo y comparto tus sentimientos.
Abrazos hermano.
Santos.. Cuánta importancia tienen las palabras con qué siempre comentas mis letras.. yo doy gracias a Dios por tus expresiones y por tu empatía..
Te mando un gran abrazo!
Raúl Daniel
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.