Tantos recuerdos se acumulan en mi mente:
Aquellos platos de sabores exquisitos,
los cumpleaños celebrados con amor,
tus cuidados y tus mil preocupaciones,
las lágrimas que por cada hijo derramaste.
Cómo quisiera que los tiempos se repitan,
pero ese mi deseo es casi un imposible:
Nunca más podré tocar tus cabellos blancos,
sentir tus manos arrugadas por los días,
ni podré recibir tus besos en la frente.
Miles de recuerdos se pintan a lo lejos:
La mesa puesta para tus hijos y nietos,
esos cubiertos especiales de mi padre,
un sitio en la mesa corresponde a cada hijo,
oración para bendecir los alimentos.
Cómo quisiera que los tiempos se repitan,
pero ese mi deseo es casi un imposible:
Quiero colocar mi cabeza en tu regazo,
recibir tus consejos para cada viaje,
y alguien que arregle mi corbata como tú.
Agradezco a Dios por todas estas memorias:
Se repiten en mi mente cada palabra,
las que sembraste con firmeza y con amor,
palabras, que a pesar del tiempo son verdades,
que guían aun nuestros pasos por este mundo.
Cómo quisiera que los tiempos se repitan,
pero ese mi deseo es casi un imposible:
Ya no hay nadie que pueda curar mis heridas,
que con una palabra arranque los pesares,
o que con una historia marque mis senderos.
Tengo la esperanza de verte allá en el cielo,
sentir entonces tus besos sobre mi frente,
poder acariciar tu blanca cabecita,
volver a acurrucarme sobre tu regazo
y decirte una vez más "Te amo Madre mía".
- Autor: Doctor Lu (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 11 de mayo de 2014 a las 20:02
- Comentario del autor sobre el poema: En mi País celebramos hoy el DÍA DE LA MADRE, dedico este poema a mi madre, aun presente en su maravilloso espíritu.
- Categoría: Familia
- Lecturas: 141
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