Una obsesión es el fuego que te quema las entrañas,
El espino más agudo, el veneno que te acaba;
Una obsesión es locura, una prisión que te mata,
Una ansiedad que no cesa, cual venenosa cizaña;
Una obsesión es condena que te encadena con saña,
Que te obtura los sentidos y tu mente te la atrapa
Es una idea constante, un deseo que no pasa,
Interminable caída en los abismos del alma…
- Autor: Raúl Gonzaga (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 20 de mayo de 2014 a las 07:23
- Comentario del autor sobre el poema: Versos de 16 sílabas, dos de ocho con rima en los pares; expresan lo dañina que puede ser la obsesión...
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 45
- Usuarios favoritos de este poema: Maria Hodunok.
Comentarios2
Me levanto pensando en ella y en cada instante del día por doquiera yo la busco por doquiera creo verla; se me esconde tras de aromas, tras de siluetas divinas, tras de esas voces serenas o tras de suaves caricias; sin embargo no la encuentro, se me escapa cual capricho y la llevo eternamente convertida en mil suspiros...
Dulcemente narrada esa obsesión Raúl, que a veces pesa y otras nos hace revivir.
Tus versos de hoy son maravillosos, un encanto leerte, poeta.
Cariñitos.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.