EL PROFE SIEMPRE TE SIGUE

Sigo siendo docente amigo mío,
el tiempo me pondrá el límite.
Me he alejado por lo injusto,
la salud me traicionó, pero no callo.
En cada poema mío hay un mensaje,
en cada cuento, una palabra de cariño. 
Así mis clases serán eternas
Escritas en un papel con alma pura
Desparramadas entre tiempos y distancias
Abriré en ellas mil puertas hacia el futuro
Dejaré impresas mis palabras a toda hora
Como si estuviera allí frente a ti,
a la clase entera, con el espíritu abierto.
Seré una luz encendida en el tiempo
y nadie podrá cerrar mi boca
con la injusta prosapia del infame.
Algunos creen ser dueños de la verdad
y yo no soy dueño siquiera de mí mismo,
pero habrá una barrera abierta
para que entre cada esencia en mi esencia.

CARLOS A. BADARACCO
18/5/14
(DERECHOS RESERVADOS)