De: Antonio Card
Ah, pálida pirámide, puerta de los sueños largos.
Yo cerraba su palma entre mis dedos.
Se callaba el mundo con sus verismos amargos
para que ella durmiera aislando miedos.
Mi voz es una flor sobre una tumba
que a la muerte quizás le sirviese de ornamento.
Y es acaso la muerte eso que zumba
igual que un corazón cuando el silencio es violento?
Da igual, noches así le ceñían a la aurora
las últimas estrellas que quedaban.
El tiempo no podía condensar todas las horas
que luego las zozobras devoraban.
Y yo le dibujaba las quimeras
como canción de lluvia, igual de exiguo y de bello;
rosas llenas de nieve, personajes de madera
y ella azul y voraz, ebria de ver todo aquello...
Con sus ojos pequeños y mis palabras en frente
Envolviera su espanto con la nada
Y la viera apagarse... morirse sencillamente
soltándome la mano -la mirada-
- Autor: Sara (Bar literario) ( Offline)
- Publicado: 3 de junio de 2014 a las 15:14
- Comentario del autor sobre el poema: n_n de mi amor...les agradezco su lectura!
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 179
- Usuarios favoritos de este poema: jaquemate, gisell_v
Comentarios3
Hermoso!!!
Siempre mi pequeño RAC, con su extensa y dulce esencia...
Mensaje para Ant., pequeña Sara: Muy buen intento de Pentaendeca en serventesios. Con unos pocos cambios, va con 10...
Abrazos
Pues si, intento. Hay descuido en la métrica.
muchas gracias Gisell
hago llegar su comentario
saludos a los dos!
n_n
drowaillet, la estructura Pentaendeca consta tanto de versos pentadecasílabos como endecasílabos. Si con el "Autor" te refieres al del poema, él entiende perfectamente mi observación.
Te recomiendo documentarte sobre la estructura "PENTAENDECA".
Suena pedante, pero tengo base para mis comentarios.
Magnífico día
hermoso tu poema desde principio a fin.
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