Con tu sapiencia magistral calmaste
Mis locos extravíos
Y en mi alma atormentada penetraste
Para insuflarme bríos.
Ahora que mis males has sanado,
Mujer de sutil alma,
Siento mi corazón avejentado
Latir con joven calma.
Y vuelo y vuelo cual la mariposa
En un lírico viaje
Para hurtarle la alhaja más preciosa
Al brillante paisaje
Y ofrendártela, amor, en gratitud
Por la calma que diste
A mi desvencijada vejentud
Cuando tan sabia fuiste.
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Autor:
rodulfogonzalez (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 13 de junio de 2014 a las 10:21
- Categoría: Amor
- Lecturas: 28
- Usuarios favoritos de este poema: esthelarez
Offline)
Comentarios4
el amor, la ensoñación y la ilusión
conforman una pócima que enciende corazones
para contagiar de viveza y alegría el cuerpo
que lo acrecienta el cúmulo de vivencias y consciencia.
.
Una lluvia de besos y sonrisas contagien este día de alegría a mi Eladio, amigo querido 😉
Gracias, amiga, por tus hermosos comentarios. Feliz fin de semana.
igual para ti, mi Eladio, amigo querido
😉
el espíritu joven es el que vale... muy buen poema. Saludos,
Gracias, amigo. Un abrazo desde mi bella Venezuela
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