Aviso que he vuelto después de muchos años ausente.
Echó su red el pescador
al mar, la echó con la intención
de llenarla simplemente
de la pesca diaria
por el constante afán
de llevar los peces a la playa,
y entregar la pesca
al patrón de la barca.
Tiraba la red al agua
simplemente, porque en su corazón
de pescador, lanzar la red
para pescar, era lo más
natural de hacer,
su tarea constante;
como tarea constante
es del mar, empujar
la marea hacia la playa.
Tan natural como le es al trigo
espigar, o como a la vid
le es entregar
a los pámpanos su vida.
Como le es natural al viñador
hacer el vino en el lagar,
para escanciarlo cuando
está maduro a la cuenca
de los vasos limpios.
En la tarea de sacar
peces del mar,
sin darse cuenta,
el pescador
fue sacando también
Ostras que adheridas a la red,
Cerradas por la fuerza
de las valvas, guardadas
en su interior traían
preciosas perlas,
las cuales no es necesidad
el poseerlas
para sentirse ricamente
abastecido de riquezas.
Con solo verlas, pues nada hay
en realidad que se posea,
si el dueño de todo
es Uno solamente,
los demás tan solo somos
espectadores de toda su grandeza.
Y de la obra preciosa de Sus Manos,
al pescador le basta con saber
halladas las perlas,
como parte de su paga,
sabiendo que ya no están más
escondidas en el mar,
donde él no tenía idea
que se hallaban.
- Autor: Carlos Cabonaro (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 29 de enero de 2010 a las 02:07
- Comentario del autor sobre el poema: En este oficio de pescar que me viene de DIOS, YHWH, he tenido la gran bendición de conocer a gente como tú, que lees y que también entiendes las palabras que ÉL me inspira a poner en cada línea, \\\"De la abundancia del corazón habla la boca\\\", gracias por leer, gracias por creer, gracias por vivir con libertad, recordando que alguien, no se quién dijo \\\"y no es libre aquel que hace lo que quiere, sino aquel que hace que se debe hacer\\\". Un fuerte abrazo a todos mis amigos, y a los que no lo son, espero sean como las ostras que se quedaron adheridas en la red. SHALOM
- Categoría: Espiritual
- Lecturas: 1236
- Usuarios favoritos de este poema: mar adentro
Comentarios2
Hermosa metáfora y hermoso comentario.
Gracias por recordarme que todos los días podemos tener en nuestra red la pesca que buscamos, tal vez alguna basurilla por ahí, y bellas perlas en las ostras adheridas a la red.
Agadezco la parte del abrazo que me toca, y lo retribuyo.
...en el inmenso mar que es la vida
es un regalo de Dios
encontrar personas que amen la creación
sin más deseo que solo admirar su infinita belleza...
como se admiran las perlas...
o una puesta de sol irrepetible...
o una lluvia de verano imponente...
el amor de Dios en todas sus manifestaciones...!!!
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