Preso vivo de mis ilusiones:
Preso a gusto de mis diarios sueños:
Preso espero resurgir la honra
De entre las cenizas, con fruncido ceño.
Acaricio momentos refulgentes
Donde la dignidad esté presente
Al frente del ejercito glorioso
De adalides guerreros liberantes
Del tedio que domina nuestras vidas,
Deshaciendo con fuerza las heridas
Que desangran nuestro mundo agonizante.
El mal se hace presente cada día
En manos de feroces "dirigentes"
Que aplastan sin piedad la fantasía
De querer mantener alta la frente:
De aspirar a sus derechos plenamente,
A los pueblos que exigen todavía,
Un poco del amor, que ausente sienten.
Como el mal es mirado de soslayo
Por los presuntos amantes de la honra,
Crece y fecunda en nuevas mentes
Que no temen caer en la deshonra.
¡Pobre humanidad ésta en que vivo!
¡Nada legamos de bueno a nuestros hijos!
Sólo se empeña en alcanzar primero,
La absurda vanidad que da el dinero.
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Autor:
pupykuba (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 25 de junio de 2014 a las 02:56
- Comentario del autor sobre el poema: Triste camino el que construimos, para las generaciones venideras.
- Categoría: Sociopolítico
- Lecturas: 129
Offline)
Comentarios2
Así es amigo, vivimos en una época de consumismo, la civilización cada día nos lleva al derroche, las distancias de nuestro hogar y el lugar de trabajo, los supermercados, y para colmo, seguiremos en aumento.
abrazo
bambam
Nosotros vemos con tristeza la descomposición social, y la pérdida de valores, creciendo constantemente, pero..¿Y las nuevas generaciones? ¿Cuales serán sus destinos?-
Vemos con tristeza, como el Dios dinero, se sitúa por encima en nuestra escala de valores. Gracias amigo, por tu comentario. Un abrazo.
Querido amigo:
Los padres somos los responsables de la crianza de los hijos y aunque quisiéramos no podemos complacerlos en todos, hay que enseñarles que la vida es de sacrificios, cuando les damos todos los gustos creen que se lo merecen todo y lo que hacemos es deformarlos.
Gracias a Dios tengo dos hijas maravillosas que siempre tienen los pies sobre la tierra y para nada son codiciosas.
Muy bueno tu poema, te admiro porque aunque quisiera no podría escribir nada sobre esa temática.
Saluditos,
Amiga Dulcinea, mi poema ha sido escrito, basado en lo que veo con tristeza a diario, a mi alrededor. Los seres humanos, debemos de tener una escala de valores, donde en forma escalonada debemos de ir situando las prioridades, y a diario contemplo como para muchas personas el primer lugar lo ocupa: el dinero. Bíblicamente hablando: "Donde está tu corazón...¡ahí está tu Dios!". Es bueno saber que estas cumpliendo con la encomienda de inculcar valores en tus hijas. ¡Te felicito! Un abrazo.
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