Te vestias de amarrillo y tú
sabías que no era mi color favorito
solo lo hacía para que me enojara
para que no fuera contigo,
me alejé de tí de sencillo
y sin drama hoy lo hace del color
que me gusta, pero ya no lo quiero
porque tengo una hermosura
que hasta el color de su ojos
es como el cielo ella se enoja
cuando no la quiero acompañar
y he empezado a quererla así de sencillo.
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