Lejos de las apariencias

Qué difícil resulta ver más allá de lo que tus ojos ven, captar la realidad sin que tu imaginación la distorsione, pensar en ciertas ocasiones que no estás sola... resulta muy dificíl. Pero también es cierto que unen más las penas compartidas que las alegrías compartidas; con esto quiero decir que cuando más sola creas estar, siempre habrá alguien ahí para tenderte su mano.

Tampoco creo en los enemigos, ni en los reencores; quizás por la sencilla razón de que nunca he sido capaz de tener nada de eso. Siempre me han dicho que más vale malo conocido que bueno por conocer; no todo el mundo es lo que dice ser o lo que aparenta, las apariencias engañan demasiado y no podemos juzgar a una persona por ello.

Además, ¿quién mejor que tú para controlar quién entra y sale de tu vida? es más doloroso ver como alguien se aleja poco a poco de ti, que el hecho de que un día se marche para siempre.

Hay otras situaciones en las que has de dejar ir a todo aquel que no se quiere quedar; de lo contrario estarás viviendo una auténtica mentira, y por propia experiencia digo que huir de esa mentira a tiempo te ahorrará mucho sufrimiento en un futuro, aunque nos duela en un presente.

Y por último decir que lo bonito de la vida es soñar, tener amigos y buenos conocidos, saber en quién confiar siempre y vivir; en definitiva.