Siento en mí el calor de tu cuerpo,
que desgarra los nervios de mi espalda,
que lacera mi pecho y siento tu aliento,
y mis manos van acariciándote lentamente.
Es pasión lo que encierra esta noche,
y me hace vibrar las neuronas de mi ser,
quiero ser tuya me dices sin reproche
déjame sentirte y llenarme de placer.
Es noche aun, que no llegue la aurora,
que no trunquen nuestras emociones,
déjame sentirte y que me llene de locura,
deja que tu pecho se llene de pasiones.
Pero es amor sentirte toda mía,
llenarme del embrujo de tu cuerpo,
acariciar tus senos con tanta fantasía
para morir de nuevo entre tus brazos.
Esa es la pasión que aún lo siento,
y que muere al llegar la mañana,
no te vayas amor de mi pensamiento,
no me dejes aunque llegue la alborada.
- Autor: Federico Mendo (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 23 de julio de 2014 a las 22:40
- Categoría: Amor
- Lecturas: 237
- Usuarios favoritos de este poema: Gisela Guillén
Comentarios1
Que bonito y sensual poema. Un abrazo.
Gracias por tus palabras y afecto,
tu presencia en mis versos es un regalo para mí
un abrazo y todo mi cariño
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