Ella está solitaria en su mundo lejano,
Su única compañía, su profunda aflicción;
Es mujer tan sensible y de gran reflexión
Que todo lo que pasa para ella no es en vano;
Pero así es este mundo, sin piedad, inhumano,
Que a todos nos condena sin alguna razón;
Yo sé que eres muy fuerte y de gran corazón
No buscas enemigos sino ese trato humano;
Sé que nada te importa, no le temes siquiera
A tanta soledad, a la injusta condena
Que todos dictaminan, actitud altanera,
Humillante venganza, por haber sido buena;
Mas no te preocupes: persona que te quiera
No te abandonará, te apoyará en tu pena…
- Autor: Raúl Gonzaga (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 30 de julio de 2014 a las 07:59
- Comentario del autor sobre el poema: Un soneto que reflexiona sobre el peor de los Bullying, la indiferencia...
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 92
- Usuarios favoritos de este poema: Maria Hodunok., Belebridiem
Comentarios3
El rechazo social, por causas económicas, de estatus o por simple envidia a los méritos alcanzados con esfuerzo y dedicación, no debería de existir porque somos hermanos; sin embargo desde Caín ya estaba presente; padres, maestros y educandos procuremos una convivencia con respeto y, en lo más posible, con fraternidad...
Grandioso, poeta y amigo.
Estas letras nos dan una gran lección de humanidad.
Siempre es un encanto leerte, por la sensibilidad de tus temas.
Un honor pasar por tu murito.
Cariñitos argentinos.
María Hodunok, el humanismo nos debe salvar de tanta discriminación, de tanta agresividad, de tanto bullying; no se nos debe olvidar que somos hermanos, no para criticarnos, sino para perdonarnos y apoyarnos en nuestro camino evolutivo; gracias y saludos y un fuerte abrazo fraternal...
Muy buen soneto; escrito de una forma que emociona; esa mujer tan sufrida.
Me fascino el segundo terceto, donde le das un toque de esperanza dicho mujer.
Saludos desde Perú.
Gracias John Morales Arriola, por tu analítico comentario; tienes razón, a pesar de la envidia y la crítica, siempre alguien nos apoya a seguir adelante; saludos y un fuerte abrazo fraternal...
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