¡Ay madre mía! Qué mal me he portado contigo,
haciéndote llorar con mi rebeldía;
cuántas veces he sido testigo
del dolor que en silencio te consumía.
Desde que yo me vine de tu lado,
siento a todos los demás como extraños;
porque únicamente tú me has brindado,
ese cariño firme a través de los años.
Quise volver muy pronto a casa,
para implorar mil veces tu perdón;
sin pensar que el tiempo pasa,
dejándonos hondos pesares en el corazón.
¡Ay madre mía!... Qué solo estoy
sin tus consejos, ni tu compañía;
y siempre a donde quiera que voy
le ruego a Dios para encontrarte todavía.
Y saber que hoy te tengo abandonada,
porque nunca te volví a visitar;
lejos de aquella humilde morada,
donde toda el alma me supiste dar.
José Alberto Laiton C.
2010 © Copyright
- Autor: calixtoelpoeta ( Offline)
- Publicado: 18 de agosto de 2014 a las 17:52
- Comentario del autor sobre el poema: Para esa viejita, que siempre nos espera y nos aguarda a pesar de la distancia y el tiempo.
- Categoría: Familia
- Lecturas: 599
- Usuarios favoritos de este poema: mariarl
Comentarios1
bello ese poema ella es lo mejor que tienes en la vida
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.