No he sentido dolor tan fuerte
en mi alma, como hoy lo sentí,
sentada tú, mirando tu suerte,
y yo viviendo a la deriva sin ti.
Te vi tan triste, sola y callada,
mirando entre las flores la esperanza,
tienes el alma rota y desolada,
tienes sed de amor y de venganza.
Porque no puedo encontrar en tus ojos,
la alegría de aquellos años pasados,
donde está tu encanto, tus labios rojos,
dime donde están tus años dorados.
Por qué te cobijas en la soledad,
y en ella quieres tu formar tu nido,
no lo intentes por favor, es vanidad,
si sabes que siempre te he querido.
No más esa mirada tan triste y vaga,
no más esa sonrisa forzada y con dolor,
no sabes que el amor con amor se paga,
algún día también te llegará el amor.
Pero no quiero verte triste y sentada,
cogiéndote el rostro, fingiendo estar viva,
no es tarde para amar bella encantada,
vives en mi corazón, como alma cautiva.
Pero que dolor verte allí con tu herida,
tú sin entenderlo y yo buscando tu mirada,
despierta de ese sueño, sonríele a la vida
entrégale al amor, tu alma enamorada.
Ya no más tristezas en tu débil corazón,
entrégame tu alma cautiva y enamorada,
te juro que en el amor existe el perdón,
y cuando hay amor todo se olvida.
- Autor: Federico Mendo (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 22 de agosto de 2014 a las 23:06
- Categoría: Amor
- Lecturas: 36
Comentarios2
Bonitas y sentidas palabras...a veces nos encerramos en nuestro mundo sin apreciar lo que tenemos alrededor.un abrazo y como siempre es un placer leerte.
Gracias por tu huella imborrable en mi verso
un saludo a la distancia
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