Me despiertas con una caricia al amanecer, tierna y dulce tu hermosa piel, esa sonrisa angelical que jámas he de olvidar, y esa mirada que de a poco me llama a quererte más y más.
Cuando se oculta el sol y cae la noche vibran dos corazones, que desbordan pasiones y de ti me enamoro más y más, que bendición, es poder compartir contigo la vida que seas mi amante y amiga.
En la tarde cuando lejos me encuentro, no sabes cuanto deseo pase pronto el tiempo para volvernos a encontrar, tomar tu mano y sentir que a tu lado ya no importa nada más.
Y cuando se oculta el sol y cae la noche, vibran dos corazones que sólo saben amar, y de tus brazos no quiero escapar, que bendición es tener tu amor y sentir tu calor, mientras me enamoro más y más.
- Autor: Benito Lucero A. (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 9 de septiembre de 2014 a las 20:19
- Categoría: Amor
- Lecturas: 126
- Usuarios favoritos de este poema: Benito Lucero, mariarl
Comentarios1
mas bello no hay niño hermoso
Gracias por lo de hermoso, jajaja...te mando un abrazo!
Saludos,
Gracias por lo de hermoso, jajaja...te mando un abrazo!
Saludos,
Gracias por lo de hermoso, jajaja...te mando un abrazo!
Saludos,
un abrazo tambien para ti
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