Adónde fuiste pequeño centinela,
en cuál estrella fulgura tu pupila;
yo soy el niño callado que vigila
y a tu asteroide muchas noches vuela.
Por qué escapaste sin decirnos nada,
tu inigualable flor está marchita
y en nuestro corazón se debilita
el rayo azul que ardía en tu mirada.
Te esperaremos hasta la penitencia,
nunca lo olvides, regresa pequeño,
porque hay un niño a la sombra del sueño
esperando la luz de tu inocencia.
- Autor: Atin58 ( Offline)
- Publicado: 21 de septiembre de 2014 a las 07:04
- Categoría: Infantil
- Lecturas: 298
- Usuarios favoritos de este poema: El Hombre de la Rosa
Comentarios1
Muy hermoso tu prosa infantil amigo cubano Atin58...
Gratificante la lectura de tus letras...
Saludos de amistad...
El Hombre de la Rosa
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.