Tengo un nervio largo
escondido en mi cuerpo
que cuando era un niño
era corto su destino
Pero ya fue creciendo
por los años vivídos
a pesar de estar metido
entre el cuero crecido.
Y así fué estirando
de la mañana a la noche
y en la próxima aclarada
el bandido ya se hallaba.
En su total alargamiento,
pero de pronto en un momento
ha quedado paralizado,
aunque la espalda se haya encorvado
Y los remedios no han dado
relajo a esta espalda,
que va llegando a la falda
por el nervio encorvado.
- Autor: Tú me interesas (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 22 de septiembre de 2014 a las 00:06
- Comentario del autor sobre el poema: Con el pasar de los años, fuera de achicarnos nos vamos encorvando.
- Categoría: Humor
- Lecturas: 58
- Usuarios favoritos de este poema: Maria Hodunok., El Hombre de la Rosa, claudia07
Comentarios3
UN MAL ANUNCIADO JEJE AHIJADO PILLINO.
BESOS.
Ya lo creo, los años nos achican de todos lados. Pero me parece que no se achico tu picardía amigo. Jajaja.
Un abrazo viejito. 😉
Muy gratificante tu lindo humor poetico amigo Gastón...
Un placer haberte leido...
Saludos de amistad...
Críspulo
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.