Solo un pedazo de tu mente me diste,
donde pusiste mi nombre muy borroso,
más yo me sentí esplendoroso,
y me sentí el mejor hombre, que viste.
Claro,yo no pedía toda tu mente,
solo pedía un pedazo de tu corazón,
aunque no fuera todo, completamente,
yo me encargaría de engañar mi razón.
Y me pusiste allí,en una esquina,
con tinta tenue,casi extinta,
la mas corriente,nada de fina,
aquella que con el tiempo se despinta.
Pienso,que sí, en realidad,el día de hoy,
soy el mejor hombre que cruzó en tu vida.
por que soy aquél, que no te olvida,
no importa por cual camino,voy.
Autor:Bernardo Arzate
- Autor: Bernardo Arzate Benítez ( Offline)
- Publicado: 27 de septiembre de 2014 a las 03:01
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 77
- Usuarios favoritos de este poema: El Hombre de la Rosa
Comentarios2
Creo que la cuestión está en que te creíste el mejor, sin querer e intentar ser mejor, primero para uno mismo, después para el otro, y luego quizás te entregue más que solo un pedazo de su mente, y poco más que un pedazo de su corazón. Me gusta lo que expresaste. Gracias por compartir 🙂
Muy hermoso tu bello poema de sentimientos y recuerdos amigo Bernardo
Arzate...
Un placer haber leido tus letras...
Abrazos de amistad de Críspulo..
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