Empujo mis manos estáticas contra mi adversario,
sus recuerdos me atacan en cada aniversario,
odio al enemigo que no conoce treguas ni horarios,
y en las trincheras solo existen llantos.
El mundo se me cierra, vivo en segundos muchos años,
tengo tanto miedo que hasta el aire me hace daño,
los silencios hoy me arañan y otra vez vuelve aquel bajón,
esta vez sé que no podré salir de esa prisión.
Hoy mi enemigo otra vez me ha declarado la guerra,
odio su cara, odio su voz, odio de la forma en que me mira,
quiero agarrar su cara y golpearla hasta hacerla mierda,
odio a aquel ser que me envenena esta vida.
Enemigo venenoso que me ha quitado toda mi suerte,
hoy te echo de aquí ya no quiero volver a verte,
días de falsos sueños de miedos, de ansiedad de llantos,
con las nubes en silencio me pregunto hasta cuando.
Pero hoy me decido a enfrentarme a ese enemigo fugaz,
disparo mil balas contra esa cara que me vuelve a mirar,
es allí donde se reflejan sus éxitos y todos mis miedos,
es la misma cara que mira todas las mañanas desde el espejo.
- Autor: Diego Lithsun (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 3 de octubre de 2014 a las 15:40
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 155
- Usuarios favoritos de este poema: crazypoet, Claritza
Comentarios2
Interesante amigo poeta
La batalla constante de una mente trastornada. Realemente muy bello tu poema. El enemigo reflejado en el espejo.
Me encante poder leerte.
Saludos,
^_^
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