DIOSA
Eres una mujer y una diosa, de poesía vestida, que vi en mis sueños de poeta atormentado y ofrendó a mi cuerpo impuro, herido por las lanzas de fuego de los años, la ternura que la amorosa madre le dispensa al hijo para confortar su espíritu. Y me creí en el cielo galopando en un caballo blanco contigo, mujer y diosa.
CONFIDENCIAS
Y desde ese onírico instante, mujer o diosa, te convertiste en la confidente a quien confié, como el pecador a Dios, como el paciente al psiquiatra, todas mis penas y dolores, todas mis debilidades, todos mis fracasos y todos mis sueños de grandeza frustrados. Y fuiste tolerante. Y me diste la medicina espiritual para calmar la depresión que me consumía.
JARDÍN
Y en el jardín de mi escondida covacha de ermitaño, apartado del ruido de las multitudes, sembré rosas amarillas para ti, mujer o diosa.
Y su luz adornó la cascada de tus cabellos.
- Autor: rodulfogonzalez (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 6 de octubre de 2014 a las 07:10
- Categoría: Amor
- Lecturas: 45
- Usuarios favoritos de este poema: Maria Hodunok., El Hombre de la Rosa, Violeta
Comentarios6
Gracias, amigo, por su lectura. Un saludo desde mi bella Venezuela.
Es siempre un encanto leerte Eladio, porque le cantás al amor, como nadie.
Sos romántico y tierno en tus letras de amor.
Un placer leerte, poeta.
Cariñitos.
Gracias, amiga del alma. Tú también te desempeñas muy bien en la lírica amatoria. Un abrazo desde mi bella Venezuela.
Muy lindo tu mosaico lirico amigo Eladio..
Un placer pasar por tu portal...
Saludos de amistad...
El Hombre de la Rosa
Quisiera saber, amigo Eladio, donde se encuentra esa pócima tan milagrosa.
Un abrazo
SIGO SORPRENDIDA CON TU BELLEZA ESCRITA....
Gracias, amor.
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