Debajo de esta piel,
Que tantos años a tu mirar se estremeció,
Debajo de mis años,
La noche santa en tus brazos cantó…
Misterio de mujer,
Rosas blancas dormidas en tu pecho,
Dos senos tibios como dos amaneceres
Que a si mismos paralelos se funden con mis besos.
En el brillante día,
La blanca seda de tu piel se refleja,
Y se vuelven tus ojos a mis ojos,
Como antes viejas promesas.
Te canto en este verso,
Que a tu sonrisa se parece,
Oh dueña del sol,
O del río manso cuando crece.
Veleta al viento,
Sin faro en alta mar,
Sin norte en la brújula del sol,
Antes de conocer tu encanto,
Sin rumbo mi vida no podía tener,
Por qué ásperos camino,
Mi alma se iba a mover,
Mi vida ha empezado a florecer,
Igual que la noche,
En un nuevo canto de amor…
Mentira, no es acaso,
De que amo tu sencillez,
Mas de todo mar he sido pez,
Pero jamás mis versos
Han hecho cantar los gorriones blancos,
Que con ebrio desencanto,
Murmuran la desdicha,
De no volverte a tener…
Luis Augusto 2014-11-11
- Autor: luis augusto romantico ( Offline)
- Publicado: 11 de noviembre de 2014 a las 20:21
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 42
- Usuarios favoritos de este poema: El Hombre de la Rosa
Comentarios1
Muy hermosa tu poesía amigo Luis
Un placer pasar por tu portal
Saludos de amistad de Críspulo
El Hombre de la Rosa
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