Regreso a Casa
cargando mis cosas
las obras, que no entregué
y esos malditos estudios
que me llevan mal.
-Que le queda poco-
¿cuanto?
-no sabría decirle
pero ponga en orden sus cosas-
¿usted cree, que si me..., opero?
-sería un milagro-.
Por la ventanilla
veo como llueve sobre el paisaje
respiro profundamente, cerrando los ojos
abrazo el bolso
y suavemente, pronuncio tu nombre.
- Autor: Esteban Couceyro (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 14 de noviembre de 2014 a las 11:29
- Categoría: Amor
- Lecturas: 61
- Usuarios favoritos de este poema: El Hombre de la Rosa
Comentarios2
Mucha melancolia y amor en tus estrofas amigo Esteban...
Un placer pasar por tu portal...
Saludos de amistad de Críspulo...
La vida lleva esas cosas...
Un abrazo
Esteban
Estás como mi esposo, te sientes perseguido por el tiempo y aprieta el temor de la partida. Eso llega cuando tiene que llegar, nos guste o no. Por eso hay que estar preparado para vivir el hoy como si fuera el último.
Sè que no vas a estar de acuerdo, pero te doy mi opinión.
Un caluroso saludo de casi verano. 🙂
Estoy totalmente de acuerdo y en lo personal no temo a la muerte, a la que considero un borde. Me aterra, no vivir lo posible, eso me suena imperdonable.
Este instante acumulado en letras, tratando de coincidir, es una buena razón para justificar la vida.
Te saludo, dejando atrás, ese personaje atribulado en su propia finitud.
Esteban
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